La pericia caligráfica en Granada es una disciplina técnica y científica que domina nuestro equipo de PERITOS CALIGRAFOS. Gracias a ella se puede discernir si determinados documentos son auténticos o falsos o, por ejemplo, si una firma ha sido realizada o no por una persona determinada. Es un método muy eficaz para detectar ciertos fraudes que consisten en la suplantación de identidad mediante la firma. Pero, ¿en que características de una firma podemos fijarnos para detectar si esta es falsa? A continuación, te exponemos solo una minúscula parte de ellas.Como sabe quién domina la pericia caligráfica en Granada, la firma es un gesto muy espontáneo, prácticamente automático y que casi hasta podemos realizarlo con los ojos vendados. El trazado de la firma es veloz, seguro y sin necesidad de retoques o rectificaciones.

De este modo, y por oposición, rasgos que nos pueden hacer sospechar que una firma sea realmente auténtica sería aquella en la que se aprecie un trazo lento, una menor firmeza, pruebas de detenciones en su trazado… Es decir, todo aquello que refleje una inseguridad por parte de la persona que la realizó.
 
A la hora de imitar la firma de alguien, solemos fijarnos en la forma, las proporciones, la inclinación, etc, son muchos aspectos los que miramos. Pero uno que puede pasar desapercibido para las miradas inexpertas es la presión. Esta magnitud es harto complicada de imitar, por no decir imposible, ya que es un signo propio de esa automatización con la que cada cual realiza el acto de la firma.

Existen otros aspectos que nuestros detectives y peritos caligráficos tienen en cuenta a la hora de realizar su trabajo, pero a ellos nos referiremos en sucesivas ocasiones.